Casi todo en el mundo es relativo. Como quien dice, depende el cristal con que se miren las cosas. Basados en este principio, la ciencia moderna plantea la idea de que no existen leyes en el universo, sólo probabilidades. Cuando uno tira una piedra al cielo, hay un porcentaje de probabilidades de que caiga luego de perder el envión que recibió (la fuerza aplicada contraria a la fuerza de gravedad) y también existe una cantidad de probabilidades de que no caiga.
Desde el punto de vista de la Torá esto es verdad. Sin embargo, la Torá propone agregar al sistema algo que es absoluto, que no está supeditado a las probabilidades, y esto se llama Di-s.
Dicho de otra manera, desde la perspectiva científica y la de la Torá, el tiempo y el espacio son relativos. La Torá da va un paso más allá y aclara que exista algo que es absoluto y es Di-s.
¿Nu? ¿Y qué tiene que ver con nosotros? Las ideas que la persona genera en su cabeza al respecto de diferentes asuntos dependen del juego de información que tenga. Viéndolo desde la perspectiva platense, ¿Quién entiende lo que es un Shabat? Un grupo reducido de personas anticuadas que aún insiste en reunirse para recitar ciertas palabras en hebreo de un libro llamado Sidur y en "sacar" la Torá para leerla (sin que nadie entienda qué está escrito!).
Esa es la perspectiva relativa. Sin embargo, cuando uno levanta un poco los ojos y se une a la perspectiva absoluta de la cuestión (por ejemplo, cuando uno se va a otra ciudad a pasar un Shabat en una comunidad donde se "pasa" Shabat) ve otra cosa: gente joven, matrimonios jóvenes, gente mayor, hombres y mujeres, disfrutan de estar juntos en un ambiente de descanso y relajamiento. Todos aprovechan la oportunidad para recargar energías materiales y espirituales para la semana, buscan momentos de meditación y unión con Di-s, retornan hacia sus fuentes, etc.
La Teoría de la Relatividad tiene razón. Hay que ver quién se anima a levantar los ojos, a abrir los ojos, a incrementar la cantidad y calidad de información sobre la cual basa sus ideas y concepciones del mundo y conectarse a la perspectiva absoluta de lo que para nosotros es relativo.