El título de esta editorial es Tefilá. Sin embargo, la idea es la de compartir y tratar de explicar un fenómeno increíble que ocurrió en La Plata pocos días atrás.

Tefilá se traduce generalmente como rezo, indicando, más particularmente el momento más íntimo del rezo, la amidá, que significa "de pie" , donde la persona se encuentra de pie frente al Rey de Todos los Reyes, el Santo, bendito sea, haciendo sus peticiones.

Ahora bien, Di-s es inmutable. Esto significa, entre otras cosas, que El no cambia. Su Voluntad no cambia y su esencia no cambia. Como decimos en el rezo mismo "Tu eres [el mismo] antes de la creación del mundo y Tu eres [el mismo] después de la creación del mundo", es decir no cambió.

La explicación detallada de esta idea escapa al objetivo de esta editorial, para eso se necesitarían varias decenas de párrafos con conceptos complejos y ejemplos que iluminacen y simplificacen lo complejo.

Asumiendo que esto es así (y es uno de los fundamentos del judaísmo), surge una famosa pregunta: si Di-s no cambia: ¿qué diferencia hay si rezo o no? ¿Acaso mi rezo va a cambiar Su voluntad de que yo este de una manera u otra? ¿Qué efecto y sentido tiene el rezo?

Una de las explicaciones es que quien cambia a través de la Tefilá es uno, y no la voluntad de Di-s. Por ejemplo, teniendo un manantial de agua limpia y potable que fluye desde las profundidades de la tierra: ¿podría uno morirse de sed? Aparentemente no, pero ¿qué pasaría si uno no se acerca y bebe? Es decir, el manantial está, pero uno debe acercarse y tomar de su agua para beber y revivir.

Lo mismo ocurre con la Tefilá. Di-s es la Fuente de toda la Vida, de Quien fluye salud, felicidad, bienestar económico, hijos, etc., pero ¿qué pasa si no "tomamos" a Di-s y lo "bebemos", ...

Ese es el concepto básico de la Tefilá, el acercamiento a Di-s, para tomar Sus infinitas bendiciones y materializarlas.

Hace poco más de un mes un platense sufrió un aneurisma muy grave en la cabeza. Entró en coma y su situación era muy complicada. Después de internación, interconsultas con los mejores médicos del campo, se determinó que no había mucho que esperar... medicamente hablando no había esperanzas de un desenlace feliz (por decirlo de alguna manera).

Inmediatamente su familia buscó la ayuda de Di-s, organizando lecturas de salmos en su mérito y juntando gente para rezar y pedir por el bienestar físico y espiritual.

Milagrosamente (¡¡¡término utilizado por los médicos!!!) después de unos 45 días en coma con complicaciones, etc., y ninguna esperanza de que la situación mejore, este platense se despertó... y comenzó a mostrar signos de conciencia y de capacidad para comunicarse.

No caben dudas (ni para los médicos ni para la familia) de que se trata de un milagro. Decían que uno de mil personas en similar situación salen vivos...

La gran pregunta no es por qué ocurrió el milagro, ya que Di-s tiene la capacidad de cambiar las reglas de la naturaleza para que pase lo que El decide que debe pasar, sino que la pregunta es ¿por qué a él? ¿por qué él es el uno de entre otros mil? ¿por qué no le tocó a otro?

La respuesta es: Tefilá. Conexión.

Tenemos las herramientas para mejorar nuestra propia situación. Tenemos el canal a través del cual podemos pedir y lograr milagros (literalmente). Lo único que se espera de nosotros es que lo usemos...

Para todos aquellos que quieran continuar rezando para la pronta recuperación total de este platense, su nombre es Iaacov Nisim ben Aída.

1 comentario en «Tefilá»

  1. gracias por lo que escriben muy lindo leerlos y APRENDER QUERRRIA UNA ORACION EN CADENA PARA MARTHA BAT ADELINA DE CAPITAL FEDERAL , CON UN POST INFARTO Y SALIENDO DE UN COMA FARMACOLOGICO ,, MUCHAS GRACIAS
    AMEN

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