En primer lugar, la palabra correcta se escribe (transliterado) con una letra H en medio, como Elo-hím (אֱלֹהִ-ים), sin embargo, por cuanto hay una prohibición de mencionar el nombre de Dios en vano y, por el otro lado una prohibición de destruir el nombre de Dios borrándolo, se acostumbra a escribir con una K (o en hebreo la letra Kuf - ק) en cuyo caso ya no hay problema en pronunciar ni en borrar esa palabra por cuanto no es un nombre de Dios.
La palabra Elokím en la Torá aparece en muchos lugares, casi siempre haciendo referencia a Dios como "Poderoso y dueño de todas las fuerzas", o sea, Todopoderoso (Shulján Aruj, Oraj Jaim 5:1).
Sin embargo hay otros significados de esa palabra, como explicaremos.
- 1. Bereshit 1:1: "En el comienzo de la creación [cuando] Elokím creó los cielos y la tierra". En este contexto se refiere a Dios como Creador y Todopoderoso.
Por cuanto la sumatoria de las letras de la palabra Elokím (86) es igual a la de la palabra haTeva (הטבע - la naturaleza), se identifica a Dios como creador de la naturaleza con el nombre Elokím, mientras que el Tetragrámaton está vinculado a Dios como infinito, trascendiendo el tiempo y el espacio (ver Shulján Aruj, Oraj Jaim 5:1).
- 2. Bereshit 6:4: "Los hijos de los Elokím". En este contexto se refiere a los poderosos de la tierra, como en Iejezkel 17:13 "A los poderosos de la tierra tomó".
La palabra Elokím tiene su raíz en la palabra hebrea El (אל), cuyo significado es "poder", como en Bereshit 31:29: "Tengo poder en mis manos", y el versículo de Iejezkel mencionado.
- 3. Otra explicación del mismo versículo se refiere a los ángeles, que también son llamados Elokím, como en Iov 1:6 "los hijos de Elokím". (Ver Rambam, Leyes de Fundamentos de la Torá, cap. 2, ley 7, los 10 nombres con que son llamados los ángeles en la Torá).
- 4. Shmot 22:7: "Y se acercará el dueño de casa a los Elokím". En este contexto se refiere a los jueces.
En cada lugar las palabras deben interpretarse según el contexto, siempre manteniendo el significado simple vigente.