Este es un discurso jasídico del Rebe anterior, Rabí Iosef Itzjak Schneerson, de bendita memoria, donde explica la verdadera virtud del pueblo de Israel: entrega incondicional a Dios. Cuando Dios exige de una persona, le da las fuerzas y capacidades para llevar adelante ese mandato.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

veinte − tres =

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.